Turismo rural, un negocio con futuro en Menorca

Menorca está de moda, de eso no cabe ninguna duda. Si antes se buscaban los lugares con mucho ambiente nocturno ahora se prefieren los lugares más relajados y con mucha menos masificación debido al COVID-19.

No obstante, no sólo la pandemia ha tenido que ver con el auge de Menorca ya que han sido varios los factores que han hecho que nuestra isla vaya desbancando poco a poco a Ibiza, tanto entre los visitantes nacionales como los extranjeros. 

Menorca, Reserva de la Biosfera

Menorca es la isla mejor conservada del archipiélago balear. Por una parte por ser Reserva de la Biosfera y, por otra, porque fue la última en sucumbir a los cantos de sirena del turismo y debido a una férrea ley de costas no es posible construir según qué tipo de edificios en la isla. 

Por ello, tanto su costa como su interior está intacta en su mayor parte. En el interior, sus valles y barrancos son preciosos durante todo el año, especialmente en otoño, invierno y primavera ya que en estas épocas del año la isla cambia su color tierra por un intenso verde esmeralda y es un placer pasear o hacer deporte (trekking, Mountain Bike, etc) por ella. En la costa, también se pueden realizar las mismas actividades por el “Camí de Cavall” (Camino de Caballos), un camino que circunda la isla y que era usado por los ingleses para patrullar en los tiempos de la dominación inglesa. Todo ello sin contar con la inmensa cantidad de playas vírgenes de aguas cristalinas con la que nos encontraremos.

Menorca, la isla del arte

Si a la búsqueda de lugares no masificados que ha traído la pandemia le sumamos las ventajas de la isla por ser Reserva de la Biosfera, la guinda del pastel la ha puesto este año la famosa galería de arte Hauser & Wirth eligiendo Menorca como su principal bastión en el Mediterráneo. Esto ha hecho que los artistas de primer nivel expongan en la isla atrayendo a un público muy diferente del que estábamos acostumbrados hasta ahora y con gran poder adquisitivo.

Invertir en Menorca, convertir una propiedad en Hotel

Debido a todos estos factores, un buen negocio ahora mismo en Menorca es comprar una típica casa de campo y reformarla para convertirla en un hotel rural de alta calidad. El campo, por desgracia, ya no genera tanto beneficio como antaño y muchos propietarios de estas maravillosas casas típicas de Menorca han decidido vender y retirarse. Incluso existen algunas que ya están reformadas como hotel con todos los permisos necesarios.

Por otra parte, las enormes casas típicas del interior de las ciudades y pueblos también se están reconvirtiendo en hoteles de ciudad con mucho encanto, los llamados hotel “boutique”, donde lo que prima es el servicio y la alta calidad.

Por ello, si deseas invertir en un campo con mucho futuro disponemos de ambos tipos de propiedades a tu disposición. Las puedes ver en nuestra web.